Había oído hablar mucho de Casa Varela y de regreso a Guitiríz paramos allí a comer. En sus origines fue bar, ultramarinos y hasta estanco, sigue conservando la esencia de aquellos viejos tiempo en su cocina de leña y en sus productos, todos de la zona.
Queda en la carretera nacional así que es mejor que ya no cojáis la Autovía, es fácil de ver... ¡porque está repleto de coches!; por lo que os recomiendo llamar antes para reservar.
Nosotros no lo hicimos y casi nos quedamos sin comer... Suerte que en el jardín tienen un tipo cenador, acristalado y con calefacción, como no tenías otra opción... pues nos quedamos.
Tienen una carta muy, pero que muy variada, desde caldo a croquetas, milanesa, chuleta, marisco, bacalao, fabas con almejas... eso si, todo casero.
No nos arriesgamos nada y fuimos a lo seguro, de primero unas croquetas de marisco y de segundo... un estupendo cocido para dos...
El cocido traía: grelos, patatas, garbanzos, carne fresca y botelo, estaba buenisimo.
Como no podíamos con mas, no tomamos postre, pero si un par de cafés y una botella de Marques de Cáceres, finalmente pagamos 47,20 € y sin duda repetiremos, porque con una carta tan amplia, me he quedado con ganas de mas.
comimos el domingo 15 de enero 2016.
ResponderEliminarBrocheta de pulpo y gambas: pulpo duro y gamba mala congelada
almejas a la marinera: secas, insípidas y salsa amarilla echa con maicena
cabrito: seco, duro e insípido
Al protestar el responsable aún tenía mas que decir y cobraron todo menos el cabrito.
lo mejor el pan y el vino, vamos, lo que no cocinaron